Consiste en una pequeña incisión de unos 15 mm por donde introducimos una cánula y por dentro de ésta, una óptica que nos permite ampliar y magnificar el campo de trabajo generalmente para microcirugía de hernia discal o de ensanchamiento del canal espinal.
La osteoporosis, las lesiones tumorales y los traumas pueden provocar fracturas a las vertebra que reducen y comprimen su consistencia ósea. A través de un procedimiento mínimamente invasivo y ambulatorio, se abre un canal hasta la vértebra fracturada y el espacio colapsado se rellena con cemento óseo. La vertebra recupera entonces su consistencia y resistencia, quedando fortalecida para resistir y cumplir con su función de soporte corporal.
Consiste en la colocación de tornillos de titanio en la columna a través pequeñas incisiones en las espalda, cuya estabilidad se consigue con barras que cierran el sistema. Todo a través de la piel. El proceso quirúrgico se supervisa mediante control radiológico, lo que permite conocer en todo momento y con precisión la óptima ubicación de cada elemento instalado.
La hernia discal se produce cuando parte del disco intervertebral comprime la raíz nerviosa de la vertebra, generando todo tipo de molestias. Se introduce entonces un electrodo a través de la piel (mínimamente invasivo) que emite ondas que por desintegración molecular reduce la masa del disco. La presión desaparece descomprimiendo la raíz nerviosa y cesando el dolor. Después de 40 minutos de realizado el procedimiento el paciente se puede ir a su casa.
Se realiza una pequeña incisión y se introduce un electrodo que genera calor por radiofrecuencia cauterizando el segmento del nervio comprometido e impidiendo de esta forma que el cerebro continúe recibiendo señales, reduciendo e incluso eliminando el dolor a la columna.
A través de una pequeña incisión en el cuero cabelludo de aproximadamente 3 a 5 centímetros se realiza un orificio en el cráneo de 1 ó 2 centímetros de diámetro llamado agujero de trépano donde se introduce un canal de trabajo que contiene una cámara de video y los instrumentos quirúrgicos que permitirán realizar los diferentes procedimientos, ya sea de diagnóstico o tratamiento.
Identificada una lesión cerebral en una zona crítica y de difícil acceso, es necesario extraer una muestra de tejido para su análisis sin dañar las zonas aledañas. En tal procedimiento se utiliza lo más avanzado en tecnología médica, el neuronavegador, que permite acceder con precisión al punto previamente fijado y obtener el material para la biopsia.
La cirugía de cerebro se beneficia de la utilización de nuevas tecnologías como la neuronavegación o la endoscopia cerebral, que permiten acceder a zonas críticas del cerebro con absoluta precisión y a través de canales milimétricos, guiados por mapeos 3D de las estructuras anatómicas particulares de cada paciente.